jueves, 13 de mayo de 2021

Gilles Lipovetsky. Por Celeste Carrillo

 Gilles Lipovetsky

María Celeste Carrillo Mendoza

Breve Biografía

Filósofo, sociólogo y escritor.
Nació en Paris, 24 de Septiembre 1944.
Hijo de emigrante judío ruso y de madre católica de Niza.
Realizó sus estudios de Filosofía en la Universidad de Grenoble.
En 1968, participó en la revuelta estudiantil que pretendía un cambio en el modelo educativo francés.
Durante un tiempo fue docente en la universidad de la que egresó y en el conocido Liceo de Orange. Se alejó de la docencia para dedicarse a escribir ensayos.
Actualmente es miembro del Consejo Nacional de Programas del Ministerio de Educación y del Consejo de Análisis de la Sociedad de Francia.
Algunas de sus obras son: “La era del vacío”; ”El imperio de lo efímero: la moda y su destino en las sociedades modernas”; “La pantalla global: cultura mediática y cine en la era hípermoderna”; “La cultura- mundo: respuesta a una sociedad desorientada” y “El Occidente globalizado: un debate sobre la cultura planetaria”, “La felicidad paradójica”; “La pantalla global” y “El capitalismo estético”.




ENSAYO

La era del vacío según Lipovetsky


El cadáver de un hombre en Sudáfrica nos ha contado la edad de la humanidad.

El cadáver no habló, pero sus restos óseos si lo hicieron. Varios científicos descubrieron que los huesos del hombre llevaban al menos 350 mil años en la tierra, esos son los restos humanos más antiguos que se han encontrado, así que 350 años es la edad oficial de la humanidad.

350 mil años son bastantes, un número tan grande que se siente imposible de contar y de alguna manera no parecen suficientes. La complejidad de la historia humana se siente mucho más grande que 350 mil años.

Desde la muerte de aquel cadáver hasta el momento en el que escribo esto, la humanidad se ha transformado incontables veces, resulta complicado seguir la pista de los acontecimientos sucedidos, aquellos que han ocasionado que la sociedad actual sea tan distinta a la sociedad que aquel hombre sudafricano conoció.

Aquel hombre sudafricano no vivió en una sociedad narcisista, aquel hombre jamás escuchó la palabra post-modernidad, el ni siquiera compartía nuestro vocabulario.

Aquel hombre no vivió en la era del vacío.

Pero nosotros y esto se ve reflejado en nuestra manera de existir como sociedad.

¿Qué es la era del vacío? Hace aproximadamente 40 años, en 1983 para ser exactos, el filósofo y sociólogo francés, Gilles Lipovestsky, desarrollo en su ensayo titulado “La era del vacío” un interesante análisis social del ser humano post-moderno.

Comenzaré por explicar la visión que el filósofo tenía del ser humano post-moderno, un ser humano que surgió a partir de la llegada de la post-modernidad en los años 70´s.

Actualmente el mundo tiene un pensamiento individualista, que según Lipovetsky consiste en una sociedad flexible que busca alcanzar la existencia de un individuo libre.

En esta sociedad flexible predominan los valores hedonistas, la relajación, la sinceridad, la libertad de expresión, la importancia del despliegue de una personalidad, el placer, las aspiraciones personales, la comunicación entre individuos, etc.

De acuerdo a nuestra sociedad post-moderna el ser humano tiene derecho a ser quién realmente es y a disfrutar la vida. El ser humano tiene derecho a ser libre.

Todo suena muy bien como teoría, pero ¿Es realmente está la manera en la que sucede?

De acuerdo a los escritos de Lipovetsky, la sociedad actual es presa de este individualismo, hemos sido manipulados por una sociedad consumista y capitalista para pensar principalmente en nosotros mismos.

La humanidad ahora tiene una personalidad narcisista. El término narcisista proviene del conocido mito griego de Narciso y al igual que el personaje del mito, una persona narcisista cuenta con un sentido exagerado de egocentrismo.

Este narcisismo en realidad no se refiere a una descripción individual, es un concepto colectivo, nuestra sociedad es colectivamente narcisista. Buscamos juntarnos con nuestros iguales, por que creemos que nuestra manera de pensar es la única correcta, creamos unidad solo con aquellos que nos recuerdan a nosotros mismo, y de esta manera el asunto público de convertirse en un elemento unificador, está haciendo justo lo contrario. Nuestra búsqueda por la unidad entre iguales ha separado a la sociedad.

Este narcisismo también afecta al proceso comunicativo de la humanidad.

Nuestro sentido de comunicación ha cambiado, la personalidad narcisista de nuestra sociedad ha ocasionado que el acto de comunicar sea más importante que el contenido comunicado, estamos llenos de información, de arte, de nuevas ideas. Y no tenemos nada que decir. El emisor parece ser el único al que le importa lo comunicado, nuestra única intención es expresar, sólo pensamos en nuestra parte del proceso. Oímos, pero no escuchamos, realmente estamos incomunicados.

Según el filósofo francés, otra característica del ser humano postmoderno es la pérdida del sentido de pertenencia histórica, hemos dejado de pensar en el pasado y el futuro tampoco está en nuestras mentes.

Tenemos al menos 350 mil años de historia que nuestra sociedad parece no reconocer. Estamos llenos de información sobre nuestro pasado, realmente vivimos en una era de sobre-información, sabemos más de lo que sabían nuestros antepasados y aún así, parece no importarnos.

El ser humano post-moderno tampoco se interesa en crear un hombre nuevo, nos hemos quedado estancados en la actualidad, vivimos dentro de una indiferencia de masas.

Somos solo un punto en la línea del tiempo de la humanidad, pero parece que nuestra sociedad cree que la historia inició y terminará con nosotros. Sí no reconocemos nuestro pasado y no estamos interesados en mejorar humanamente, hemos perdido el sentido de lo que vivimos, esto es a lo que Lipovetsky llama “la era del vacío”. Nuestra sociedad se encuentra entre la nada y la nada. Una “nada” que realmente es un todo, pero que nuestra sociedad híper-individualista no alcanza a reconocer. Decimos que nos importa, pero nuestras acciones contradicen nuestras ideas. Nosotros mismos hemos creado el vacío de la era.

Entonces. ¿En verdad es posible alcanzar esta libertad que la post-modernidad nos ha prometido? Honestamente, parece que el pensamiento individualista es tan solo otro metarelato disfrazado de libertad. 


Referencias:

Carrillo, C. (2021) 1er reporte. Tabla de información. Filosofía de la comunicación. Tercer parcial. Universidad Ibero León.

Lipovetsky, G. (1983). La era del vacío. Formato PDF. Recuperado de: http://catedradatos.com.ar/media/lipovetsky-La-era-del-vacio.pdf

Teran, C. (2021). La Era del Vacío. YouTube. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?v=h5iHuYlU7FM&t=672s

Traficantes. (2021). LA ERA DEL VACÍO. Traficantes de Sueños. Recuperado de: https://www.traficantes.net/libros/la-era-del-vac%C3%ADo

D. (2020). La era del vacío: Resumen crítico. Hijos del posmodernismo. Recuperado de: http://hijosdelposmodernismo.es/la-era-del-vacio-de-gilles-lipovetsky

Reuters. (2018). Estudio revela que la humanidad cumple cerca de 350 mil años en la tierra. El Sol Columnas. Recuperado de: https://www.elsoldemexico.com.mx/doble-via/ciencia/estudio-revela- que-la-humanidad-cumple-cerca-de-350-mil-anos-en-la-tierra-259015.html

 

 

 


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